Leo Messi asistió a la entrega del Balón de Oro en la antigua fábrica de Estrella Damm por ser el máximo goleador de las ligas europeas la temporada pasada. Allí fue acompañado por los suyos y también compañeros del conjunto blaugrana como Sergio Busquets, Xavi o Puyol.
Cuando acabó la ceremonia, el jugador argentino concedió una rueda de prensa en que comentó que “recuerdo los goles por la importancia más que por ser lindos. No recuerdo todos los goles de la temporada pasada, cuando los veo sí, pero sobre todo los recuerdo por la importancia como en el Mundial de Clubs”.
Sobre el trofeo, Messi señaló que “la ilusión y la alegría es la misma que en la primera. No es fácil ganar una y mucho menos dos. Estoy contento y agradecido”.
“Muchas veces lo dije, no peleo por los premios individuales, sino por tratar de lograr un título con el club como la Liga, la Champions o la Copa del Rey. No peleo por volver a conseguirlo, si se da mejor, sino no pasa nada”, afirmó el argentino.
La forma de otorgar el premio también estuvo entre las preguntas y Messi fue claro: “Es diferente, nadie lo elige. Lo gana uno con sus goles pero no sé si es más justo o menos, es diferente porque no hay votación ninguna”.
En el partido contra el Rayo Vallecano, el delantero blaugrana se acercó a conseguir el récord de goles de Pelé y el astro argentino dijo que “para mí es un orgullo poder estar tan cerca de esos números y de esa persona tan grande en el mundo del fútbol como es Pelé”.
También se mostró agradecido al club “por lo que hizo por mí en su momento y así poder cumplir un sueño. Me gustaría poder terminar mi carrera futbolística aquí y antes de mi retirada poder jugar en Argentina”.
Precisamente ahora se siente muy comodo con la selección de su país después de revertir las críticas pasadas. A eso ayuda que “el equipo esté ganando y así la gente reconoce mi trabajo como en River, Córdoba o Mendoza”.
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